Los elementos geológicos constituyen un recurso científico y educativo muy importante. En ellos, quedaron registrados millones de años de historia de la Tierra a lo largo de la cual los continentes se han movido, los climas han variado, el nivel del mar ha ascendido y descendido, y las plantas y animales han aparecido, evolucionado y, en algunos casos, desaparecido.
El estudio científico, el uso educativo y el disfrute recreativo de estos rasgos geológicos necesitan lugares con programas de calidad en el ámbito de la investigación, el aprendizaje y el ocio. Por lo tanto, para que el conocimiento de las ciencias de la Tierra avance, es necesario no solo conocer sino conservar el patrimonio geológico y la geodiversidad, para que las generaciones futuras puedan hacer un uso responsable de ellos.